viernes, 10 de septiembre de 2010

La tortura no es cultura.-



André Malraux decía que la cultura es todo aquello que engendra vida, aun tras la muerte.

La cultura siempre es vida, siempre va ligada al avance, nunca al retroceso, siempre a la reflexión, nunca a la barbarie ni al mimetismo, siempre a la esencia de las cosas, nunca a las apariencias, siempre al respeto, y nunca al desprecio de ninguna forma de existencia.

La UNESCO defiende que “...la cultura da al hombre la capacidad de reflexionar sobre sí mismo. Es ella la que hace de nosotros seres específicamente humanos, racionales, críticos y éticamente comprometidos. A través de ella el hombre se expresa, toma conciencia de sí mismo, pone en cuestión sus propios actos, busca continuamente nuevas significaciones, y crea obras que lo trascienden”. (UNESCO, 1982).

No puede entenderse, que siga habiendo gente que defienda la crueldad de la tortura y de la muerte gratuita de una vida como algo cultural.