miércoles, 2 de junio de 2010

El mañana nunca llega.-

Si te tomas la vida como algo sencillo, si se torna satisfactoria, poco a poco, lo mismo pasará con tu muerte. ¿Qué estamos haciendo?

No estamos disfrutando de la vida; sólo nos estamos preparando para disfrutarla. Y la vida es aquí y ahora; no se necesita preparación alguna.

Veo gente que siempre se está preparando para tener una gran vida en algún lugar en el futuro.

Tendrán miedo a la muerte, pues en el futuro espera la muerte. Y tu vida también está en el futuro: te estás construyendo una casa, o te estás comprando un auto, y esto y aquello, acumulando cosas; simplemente, preparándote para vivir.

Nunca estarás preparado y, en el momento en que lo estés, la muerte golpeará a tu puerta. Ese es el temor, que "la muerte pueda llegar antes de que estés preparado".

Un hombre con capacidad de discernimiento vive la vida aquí y ahora; la vive en cada momento. Para él, no hay muerte, porque no hay vida futura. Él agota el momento, lo vive completamente, lo disfruta, está agradecido.

¿Dónde está el temor a la muerte, si en este momento estás vivo? No intentes estar preparado para morir; sólo vive.

Y te digo que todos, tal como somos, estamos preparados para vivir el momento presente.

Recuérdalo: no pospongas, no dejes las cosas para mañana. Aquí y ahora, está todo lo que necesitas. Disfrútalo y, cuanto más lo disfrutes, más te será dado.

Eso quiso decir Jesús cuando afirmó que, si golpeas, la puerta se te abrirá; si pides, te será dada. En este momento, la puerta está allí. ¡Pide, golpea, vive! No lo dejes para después.

Ese es todo el mensaje de los que han tomado consciencia: alcanza con hoy; el mañana se ocupará de sí mismo. Y el mañana no llega nunca; siempre es hoy.

OSHO