La Fuerza Física es otorgada por cada una de las Potestades de vida de los Elementales ( Agua, Viento, Tierra y Fuego ) le da una resistencia al cuerpo para no perecer ante las alteraciones del medio que le rodea y que éste se manifiesta con estas fuerzas según el Amor que existe para sí mismo y su entorno.
Cuando se empieza a opacar el amor por el odio, los rencores, los resentimiento, provoca que las células vayan perdiendo Armonía y, entonces, se manifiestan enfermedades en el organismo:
El odio provoca cáncer, embolia y problemas circulatorios.
Los rencores generan problemas digestivos, cálculos biliares y renales.
Los resentimientos causan pérdida de memoria, hipertensión y alteraciones nerviosas.
Las Preocupaciones afectan a los riñones.
Estas emociones negativas influyen en el funcionamiento del cuerpo físico y lo dañan, ya que las sustancias químicas que son liberadas por el cuerpo, lo intoxican pero al mismo tiempo lo hacen dependiente de ellas y es por ello que se llaman vicios.
Existen otras emociones que también causan desarmonía:
La decepción te lleva a la pérdida de voluntad, a las miopías, la sinusitis y afecciones pulmonares.
Los miedos son emociones que pueden incapacitar el cuerpo físico. Son las
emociones más fuertes que producen: Parálisis cerebral, coma, diabetes y pérdida de vida.
Visto de otra forma: ¡Todas las enfermedades son emocionales!
Los Elementales que forman el cuerpo no son responsables de la desarmonía, sino el Ser que permite que estas emociones negativas del Alma se desarrollen en él. Hay muchas más, pero lo importante es saber que se puede llevar sanación al cuerpo si se lleva a cabo la práctica del amor y el perdón y ejercer la potestad de la regeneración (sanación) otorgada desde el Principio de los Tiempos para curarse uno mismo.
¡Todo está en que el Ser se decida en libre oluntad!
Se preguntarán: ¿ Cómo se logra esto ?
El condicionamiento social y cultural generaría el escepticismo: ¡Es imposible!
Pero existe una razón.
Según el diccionario de uso corriente, “enfermedad” es “alteración de
la salud” o bien, “anormalidad en el funcionamiento” y “alteración” se entiende como “sobresalto, inquietud” o bien “desarreglo mientras que “anormalidad” se dice que es “carácter anormal”, es decir, “irregular” y su definición de “que no es regular o simétrico”, por lo que se concluye que “le falta armonía”.
LA AUTOSANACIÓN
La armonía se entiende como “unión, combinación” por lo que vivir en armonía través del amor y el perdón evitará que las fuerzas negativas contaminen al cuerpo y el campo negativo del alma no crezca, de tal manera que lo que se obtiene inmediatamente, es un cambio en el cuerpo físico, el que sus funciones se lleven a cabo favorablemente.
¡Cómo se logra esto?
En el reconocer los actos y aceptar los errores, ver la dimensión de los mismos para corregirlos y hacerse responsable. El tener que aceptar que se ha fallado es un símbolo de nobleza y no de debilidad.
El fracaso es el resumen de experiencias que deben llevarlo a ser mejor. Entonces, no se verá como un fracaso en sí y en cambio se asimilará como una enseñanza que le permitirá ser mejor.
Si se analiza bien el por qué de las cosas, uno se podrá dar cuenta que en ocasiones, no toda la observación que se cree poner en una acción, es la suficiente y que este descuido le lleva a uno a no lograr los objetivos.
El exceso de confianza provoca muchos errores como también la baja estima.
Cada quien debe de ver sus actos. Los que se cree que afectaron a uno se deben ¡perdonar!.
Pero es necesario a perdonarse a uno mismo por no haberse prevenido de ellos y entonces se verá como no hay culpables, sino que todo está en la responsabilidad verdadera con que se asuman los hechos y esto le llevará a no volver a caer.
Fuente:
Manual de Autosanación de la Hermandad los guerreros espirituales
