"Escribiré no sólo para no morirme, sino para ayudar a que otros vivan, porque parece que alguien necesita mi canto.
Yo creo que seguiré cantando hasta morirme.
Será mi voz, la voz del fuego o de la lluvia, o la voz de otros hombres.
Así es el hilo de la poesía, simple, sagrado, eléctrico, fragante y necesario y no termina en nuestros pobres manos: Lo revive la luz de cada día"
Pablo Neruda
